Tres Actitudes hacia Dios

Ignacio habló sobre el propósito de la vida en el Principio y Fundamento. En las siguientes publicaciones, exploraremos paso a paso la enseñanza de San Ignacio sobre este tema. Vale la pena señalar, en primer lugar, que nadie puede imponerte un Propósito para tu vida. Cada persona debe elegirlo por sí misma. Sin embargo, como director espiritual, me encuentro con muchas personas comprometidas en esta búsqueda. Ignacio habló de tres actitudes básicas que nos dan un sentido de propósito. Es sorprendente que pudiera hablar de algo tan grande de manera tan sucinta.


Estas tres actitudes básicas son: Alabanza, Reverencia y Servicio. A veces, esto se resume simplemente como estar en la correcta relación con Dios. Sin embargo, esas tres actitudes particulares son importantes. Una actitud de alabanza hacia Dios significa vivir con los ojos abiertos a la bondad y belleza de la creación, significa vivir en gratitud. Una actitud de Reverencia es el reconocimiento de que Dios es "más grande". Más grande que mis problemas y más grande de lo que podría querer que sea (no puedo controlar a Dios ni imponer mis reglas sobre Él). Finalmente, una actitud de servicio requiere que no me haga pasar por el salvador del mundo. Sirvo a Dios y al pueblo de Dios. Soy parte del pueblo de Dios. Servir a Dios implica ver las necesidades a mi alrededor, pero luego preguntarme cómo Dios, no mi ego, me está pidiendo que maneje esas necesidades, amando a los demás como a mí mismo, ni más ni menos.


P. Pepe Ruiz, SJ